Para aprender a redactar con pocas palabras, sin filigranas, escuetamente y al grano, el Ayuntamiento de Madrid viene en nuestra ayuda con sus formularios.
Después de rellenar los datos personales, el formulario sigue con un apartado EXPONE.
Para el EXPONE hay cinco líneas muy juntitas para escribir a mano con letra legible y apretada. He podido embutir 50 palabras. No caben más.
En el apartado SOLICITA, tenemos sólo cuatro líneas. He conseguido colocar 30 palabras. No caben más.
Rellenando estos formularios aprendemos a expresar nuestras quejas y solicitudes con las palabras justas y exactas. Aquí no vale la retórica ni andarse por las ramas. Tenemos que hacer un ejercicio de humildad.
El Ayuntamiento de Madrid no se aplica el cuento y cuando recibimos -¡maldición!- una nota oficial, demuestra diarrea verbal mareando la perdiz y repitiendo lo innecesario.
Escribo esto para su conocimiento y otros efectos.
Dado en Madrid el día 10 de abril del año de gracia de 2014,
Dios guarde a su Excelencia, Señora Alcaldesa, muchos años, y quedo de usted, su humilde y afectísimo súbdito -¿siervo?- que besa sus pies,
Delfín Carbonell
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