domingo, 4 de mayo de 2014

CLARIDAD ESMERADA EN LA EXPRESIÓN

Escribe Antonio Muñoz Molina en el prólogo a ESCRIBIR BIEN PARA TORPES:

"Seguimos sin tener mucha suerte. Al oscurantismo cuartelario y beato de otras épocas le ha sucedido una mezcla de autoindulgencia universal en la que la aspereza y la grosería se toman como signos de autenticidad y en la que todo lo que se diga da más o menos lo mismo: importa que quede claro no el mensaje, sino el ataque o la aquiescencia, la indicación clara de la tribu a la que uno se ha afiliado. El acuerdo tranquilo sobre unos cuantos principios que por su propia naturaleza no están sometidos a debate es tan imposible entre nosotros como la claridad esmerada en la expresión."

Entresaco las palabras
autoindulgencia
aspereza
grosería
claridad en la expresión

Se ha de intentar ser riguroso con uno mismo, no autoindulgente, porque no escribimos para nosotros sino para los demás. Más tarde o más temprano alguien leerá lo que hemos escrito. Hará un esfuerzo económico y de tiempo para zambullirse en nuestras palabras... y no debemos defraudar. No todo lo que se diga "da más o menos lo mismo."
Tampoco seamos innecesariamente ásperos o groseros al desarrollar nuestras ideas por escrito. La aspereza y la grosería, tan de moda hoy, no nos llevará muy lejos. Lo cortés, como sabemos, no quita lo valiente.
Y la claridad y economía en la expresión es la mejor política a seguir en nuestros escritos.

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